GRACIAS, JOSÉ ELADIO CAMACHO.

 Hoy, 28 de marzo, la Farmacia de José Eladio Camacho cambia de dueño.  Una noticia, medio alegre medio triste. Por una parte, me alegro que José Eladio haya podido venderla, pues esa era su intención, y parece que a una buena persona. Pero por otra, siento tristeza. Es el final de una bonita etapa.
Me gustaría dedicarle unas líneas a este señor, "señor" con todas las letras. Según él, aunque es nacido en El Gordo, se siente "de la zona", entre Navalmoral y Talavera están todas sus raíces. En Berrocalejo tiene a su querida madre, en Valdelacasa trabaja su querida señora, en Talavera viven...Y en Valdeverdeja... a Valdeverdeja llegó hace 40 años como farmacéutico y aquí se quedó. José Eladio se ha convertido en toda una institución para el pueblo. Tras una breve y emotiva conversación, recuerda tantas cosas vividas con nosotros. Han pasado varias generaciones por su farmacia, ha conocido a tantas personas, sabe muy bien "de qué pie cojeamos cada uno". Primero nos atendió en la farmacia de D. Anibal y luego se hizo la suya que es la más bonita en muchos kilómetros a la redonda.
 Nos puso cine en la parte de arriba del colegio; siempre me acordaré del la película Toby, el niño que tenía alas... y tantas otras. Buenos ratos nos hizo pasar.
Recuerda con añoranza a tantos médicos, practicantes, maestros, guardias civiles que pasaron por aquí y como antes todos estos profesionales se quedaban a vivir en el pueblo, pues había buenos lazos de unión entre todos ellos. Pero, a decir verdad, de quiénes más se acuerda es de quienes se han ido, se fueron tras una enfermedad,  ancianidad o....se fueron. No me atrevo a mencionar a nadie, porque sería una lista interminable. José Eladio los tiene en su memoria y les recuerda con cariño.
Para mí, siempre ha sido una buena persona, amable, generoso, cercano, con una educación exquisita y una gran sabiduría en muchos y diversos temas. Nos ha querido acercar la cultura convirtiendo su preciosa farmacia en un "mini museo", en el que siempre he encontrado cosas bonitas y con un gusto extraordinario. Es un enamorado de Portugal, y siempre nos ha aconsejado para visitar este  pueblecito  o el otro monasterio, dónde escuchar buen fado, etc...
La verdad es que no me canso de alabarle, pero creo que se lo merece. Solo desearle que en esta nueva etapa siga disfrutando de la vida como él sabe hacer; siga cultivándose con la lectura, viajando por tierras lusitanas, cuidando de su madre y ,todo eso y más, acompañado de su querida Concha. Y por supuesto, no deje de venir a vernos que siempre será muy bien recibido.
Ah! Del nuevo farmacéutico, D. Carlos Gómez, a quien le deseo le vaya igual de bien, me ha dicho José Eladio que es...!mejor que él!...(Si él lo dice....)
Lo dicho, Gracias por todo, José Eladio Camacho.
Con cariño, Rosa Mª Rosado.

Comentarios

  1. Rosa Maria, me han emocionado tus palabras para ese gran amigo que creo todos tenemos en Valdeverdeja, al menos, yo, sí.

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  2. Gracias,d.José Eladio,gran profesional y compañero,caballero en sus obras y gestos,torero de mano izquierda baja y firme suave y elegante en lo humano,prohombre ayer,hoy y mañana,siempre.Carlos.J.Gomez

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  3. Gracias Rosa,espero ser un verdejo mas aunque adoptado!ya sabéis donde estaré para lo profesional y personal,un saludo.

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  4. Señor con mayúsculas, igual que profesional y buena persona. Deseo lo mejor para esta nueva etapa que seguro sabrás aprovechar

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  5. Adoración sanchez29 de marzo de 2017, 20:16

    Gran persona Eladio, y muy amigo de sus amigos, siempre dispuesto a tender la mano a quien más lo necesita, espero que la vida te trate muy bien , te lo mereces, te echaremos de menos, un abrazo de parte de mi familia

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  6. Todo lo mejor para él en su nueva andadura. Gracias por haber compartido con Valdeverdeja y sus gentes. ¡hasta pronto!

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  7. Andrea FERRERAS y Familia7 de abril de 2017, 15:20

    Jose Eladio.
    Te deseo lo mejor en tu nueva vida. Disfrutala. No olvidaras a Valdeverdeja y a su gente. Te aseguramos que nosotros a ti tampoco.
    Tambien damos la bienvenida a D. Carlos Gómez, en espera de saludarnos, aunque sea una vez al año.
    Un saludo desde Paris.

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